No son pocos los que anhelan con un estilo de vida más rural, pero las exigencias laborales les exigen vivir en ciudades. Si embargo, no es necesario renunciar a una faceta más rural y a conectar con el hortelano que se lleva dentro y montar un pequeño huerto en casa.
Las viviendas actuales, las nuevas construcciones, se planean y edifican teniendo en cuenta unas buenas condiciones de luz, un buen y eficiente aprovechamiento de la misma, así como el empleo de materiales más sostenibles. Se busca que las personas que las habiten, que inviertan en ella, sean conscientes del mundo en el que viven, un mundo que ha de ser más responsable con el medio ambiente. Este cambio también tiene que estar acompañado por los hábitos en la alimentación, lo que conecta directamente con el principio de este artículo. Vivir de una forma más sostenible, saludable, responsable y consciente; llevando a cabo desde pequeñas iniciativas como tener un pequeño huerto en casa para iniciarse en la producción de nuestros propios vegetales, hasta la compra de una casa eficiente y certificada con calidad energética.
Además de todo esto, desarrollaremos una afición al alcalde de todos en la que solo hay tener claros algunos conceptos básicos y poco a poco ir aprendiendo con la experiencia.
Tener un pequeño huerto en casa servirá como un ejercicio de sostenibilidad, que nos convierte en ciudadanos más comprometidos con el medio ambiente y más responsables en nuestro consumo. Los profesionales de Planeta Huerto encuentran las siguientes ventajas y argumentos para lanzarnos a esta actividad:
- La mayor parte de la población vive en ambientes muy urbanos sin ningún contacto con el medio natural y rural, esto hace que cada día más personas sientan la necesidad de introducir un poco de «verde» en sus vidas.
- Disponer de un pequeño huerto en nuestro hogar, va a suponer una vía de escape frente al asfalto, el cemento, el ruido, la contaminación y también frente al estrés y las preocupaciones.
- Nos va a permitir conocer el ciclo de vida de los vegetales y las relaciones entre distintos seres vivos, potenciando nuestra capacidad de observación y ofreciéndonos un recurso educativo muy valioso para nuestros hijos.
- Constituirá un lugar de aprendizaje continuo a través de la experiencia que vayamos adquiriendo en el cultivo de nuestras hortalizas.
- Nos proporcionará alimentos sanos, nutritivos y sabrosos que nos harán pensar en el origen de los alimentos, convirtiéndonos en consumidores más responsables y exigentes en cuestiones como la seguridad y la soberanía alimentaria.
Para ello, necesitaremos:
Un lugar con luz directa: Podemos crear un huerto urbano prácticamente en cualquier lugar, un pequeño jardín, un patio, una terraza, un balcón o incluso una ventana nos va a permitir cultivar nuestras hortalizas. Pero hay una cuestión indispensable, que es disponer de un lugar con luz directa.
Recipientes y sustratos: En una vivienda unifamiliar con un pequeño terreno, podremos destinar una zona para nuestro huerto, delimitando el espacio y aportando al suelo abonos orgánicos que mejoren sus condiciones físico-químicas y su fertilidad. Pero si no disponemos de suelo, podemos crear nuestro huerto usando recipientes de cultivo y sustratos orgánicos.
Sistema de riego: Una de las tareas más importantes y donde tenemos que ser más precisos es en el riego, buscando siempre mantener una humedad constante. Podemos regar de forma manual, lo cual será un buen método sobre todo en pequeños huertos. Si tenemos un huerto relativamente grande y sobre todo si en la época de verano recibimos mucha insolación, es de gran ayuda la instalación de un sistema de riego por goteo con programador. También tenemos la opción de las jardineras con autoriego, que disponen de un depósito de agua en la parte baja que mantiene húmedo el sustrato permanentemente.
Semillas y Plantones: Para el agricultor principiante recomendamos comenzar a cultivar utilizando plantones. Poco a poco, conforme vayamos adquiriendo experiencia, podemos ir combinando el uso de semillas y plantones, optando preferentemente por el uso de semillas ecológicas.